Hoy comenzamos la Novena a nuestra Madre, María Inmaculada, la mujer que fue sencilla y humilde, por eso Dios se fijó en su pequeñez.
La reflexión de hoy nos ayudará, a través de los pensamientos de Madre Carmen, a unirnos a la Virgen, a quien tanto queremos. Reflexiona, ora, mira a María, descansa con Ella, estudia poniendo tu confianza en su ayuda... y no olvides dedicarle algo de tu tiempo, uniéndote a tu Familia Concepcionista, en la Eucaristía de la Novena que se celebra en tu Colegio.
Damos las gracias a M. María Saiz, Religiosa Concepcionista en Pozoblanco (Córdoba) y que la Comunidad Educativa Concepcionista de Mazanares recordará con cariño, por sus años entregados en el Colegio hasta este curso escolar, que nos ofrece esta bonita reflexión tan apropiada para estos días.
Feliz Novena de la Inmaculada a todos y que la Virgen nos dé su bendición.
ECO
Nº 13 DEL PENSAMIENTO DE CARMEN SALLÉS
“El Señor ha mirado mi pequeñez…” Me ha mirado con amor. ¿Cómo puede ser mi respuesta sino noble y generosa, lejos de toda ruindad y resentimiento?”
REFLEXIÓN de M. María Saiz, rcm
“El Señor ha mirado mi pequeñez…” Me ha mirado con amor. ¿Cómo puede ser mi respuesta sino noble y generosa, lejos de toda ruindad y resentimiento?”
REFLEXIÓN de M. María Saiz, rcm
Queridos jóvenes, ya sabéis que
María Inmaculada fue siempre el Espejo donde mirarme, la Amiga, Compañera fiel
y Madre en quien apoyarme, ¡cuánto aprendí de Ella en mi vida!! Hice mías sus palabras: “El Señor ha mirado
mi pequeñez…” así lo sentía, así me sentía, pequeña y frágil en medio de los
gozos y las dificultades que iba viviendo, antes y después de fundar la
Congregación, pero caminando siempre adelante… con la certeza de que la
Congregación era obra de María.
Como Ella sentía como Cristo me miraba con inmenso amor y yo, enamorada de Él, no podía hacer otra cosa que responder con un corazón sencillo y generoso. Amigos, no siempre fue fácil, hubo momentos muy duros en mi vida en los que tuve que perdonar a personas que me hicieron mucho daño, traicionaron mi confianza y se pusieron en mi contra. Pero…¿no le pasó esto también a Jesús? ¿Cómo fue su respuesta? No es fácil comprender, acoger y amar en esos momentos, pero mi corazón era de Jesús y Él… Él solo sabe amar. Yo tenía que seguir aprendiendo cada día, con la confianza de que “el amor vence”, el amor es capaz de cambiar el mundo.
Querido joven, Cristo también se ha enamorado de tu pequeñez, sí, sí, de la tuya, con tus virtudes, defectos y debilidades, como eres. Para Él no eres un número, eres una persona, alguien muy importante y te quiere de forma única. Te mira cada día y ¡¡te ama con todo!! Descúbrelo, créelo, atrévete a dejarte amar y ama con todo tu corazón y en todas las situaciones, ten la certeza de que si amas así, como Jesús, serás feliz!!
Y recuerda Dios te conoce, te quiere, está contigo y te mira cada día con su inmenso amor.
Como Ella sentía como Cristo me miraba con inmenso amor y yo, enamorada de Él, no podía hacer otra cosa que responder con un corazón sencillo y generoso. Amigos, no siempre fue fácil, hubo momentos muy duros en mi vida en los que tuve que perdonar a personas que me hicieron mucho daño, traicionaron mi confianza y se pusieron en mi contra. Pero…¿no le pasó esto también a Jesús? ¿Cómo fue su respuesta? No es fácil comprender, acoger y amar en esos momentos, pero mi corazón era de Jesús y Él… Él solo sabe amar. Yo tenía que seguir aprendiendo cada día, con la confianza de que “el amor vence”, el amor es capaz de cambiar el mundo.
Querido joven, Cristo también se ha enamorado de tu pequeñez, sí, sí, de la tuya, con tus virtudes, defectos y debilidades, como eres. Para Él no eres un número, eres una persona, alguien muy importante y te quiere de forma única. Te mira cada día y ¡¡te ama con todo!! Descúbrelo, créelo, atrévete a dejarte amar y ama con todo tu corazón y en todas las situaciones, ten la certeza de que si amas así, como Jesús, serás feliz!!
Y recuerda Dios te conoce, te quiere, está contigo y te mira cada día con su inmenso amor.