Comienza el mes de mayo, un mes para caminar de la mano de María, un mes para dirigirte a Ella a través del rezo del Rosario, de una visita sencilla a la Virgen de tu colegio, de la Parroquia o ante esa imagen que tienes en casa... Un mes para contemplar esa estampa que llevas en la cartera, que tienes por "señalalibros"... Un mes para dirigir una miradita al cielo y regalarle un "piropo", una alabanza, un "te quiero". Un mes para pensar en Ella mientras vas en el autobús, en el metro, caminando por la calle.
María, nuestra Madre, nos cuida y protege, actúa como mediación ante Dios. Como buena Madre, sabe lo que necesitamos y lo que más nos gusta.
No dejes pasar ni un solo día de este mes de mayo sin dedicarle algo especial. No te excuses detrás de tu mucho trabajo, los estudios o los agobios de la vida diaria. En un solo segundo se puede amar de corazón, en un minuto puedes expresar mil palabras de agradecimiento... en poco tiempo te puedes parar a contemplar la belleza, los gestos y las virtudes de María.
Cada día cuando te levantes puedes decir:
TE QUIERO, MADRE... Y HOY TE LO VOY A DEMOSTRAR.
Canción "Hágase en mí" del Cd TIERRA DE BENDICIÓN.
Concepcionistas Misioneras de la Enseñanza
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