miércoles, 5 de marzo de 2008

UNA LLAMADA... UNA RESPUESTA... UNA VIDA ENTREGADA

Soy concepcionista desde los 18 años cuando hice mi primera Profesión. Si fuera hoy se diría que estaba en plena adolescencia, pero entonces la vida te ayudaba a acortar las etapas. Soy muy feliz de serlo; es la respuesta más importante y más acertada de mi vida; porque fue una respuesta. Respuesta a una llamada, que oí a los 14 años, precedida de unas circunstancias externas que la favorecieron:

  • ver que la vida de mi hermana se pudo ir en un segundo, y merecía la pena vivirla entregada plenamente.
  • La felicidad que descubrí en alguien que estaba ya entregando la vida. Si esa persona era feliz de esa manera yo no me veía que podía serlo de otra. Como en la parábola de Juan Salvador Gaviota, no iba a ser feliz como vivía la bandada.

Doy muchas gracias al Señor por este detalle que tuvo conmigo, por los medios que he tenido y tengo de conocerle más, por las hermanas con las que he vivido en comunidad, por la misión educativa con adolescentes, y por lo que últimamente me está mostrando.

Conocer el Congo hace un año ha sido una experiencia inolvidable, el llanto desgarrador de esta niña en un orfanato, abandonada al nacer, (además de otras muchas cosas), me zarandeó las entrañas, al cogerla en brazos me regaló esa sonrisa; lo más duro fue dejarla de nuevo envuelta en un nuevo llanto y con unos ojos que me decían “quiero el cariño de una madre, no me dejes aquí”.

Eso he pretendido en mi misión educativa, acoger, querer, acompañar…para que cada niña/o, sacando lo mejor de sí mismos, crecieran como personas y fueran felices; no siempre lo he conseguido. Han sido un don para mí también, las muchas personas que se han cruzado en mi camino y me han ayudado a que yo creciera.

Eso te deseo a ti, lector/a del blog, “tú puedes ser más feliz, encuentra la alegría en ti”. (Musical M.Carmen)

M. Benita Espadas



Gracias por este sencillo y entrañable testimonio que nos ofreces. Toda vida que se entrega generosamente se hace bella ante Dios y ante los demás, porque sólo el amor es el único capaz de transformar, sólo el amor puede llegar a lo más profundo e íntimo de cada persona, sólo el amor nos iguala en la diversidad. En la Vida Religiosa hay una faceta preciosa, que es la de sentirse "madre" de tantos niños y jóvenes que no la tienen...; de los que aún teniéndola, no la tienen cerca lo suficiente; o de aquellos que pudiendo disfrutar al máximo de ella, necesitan a otra "madre": amiga, compañera, confidente..., que les acompañe en su caminar diario. ¡Qué gran dicha, poder ser Madre Concepcionista! Que Dios siga bendiciendo tu misión como madre, como hermana, como hija de Dios.

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3 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por compartir tu experiencia de vida, tu testimonio y entrega es estímulo para las que venimos detrás con el deseo de ser concepcionistas.

¡¡Siempre Adelante!!

Las novicias "normales" jajaja!

Anónimo dijo...

Para los que no fuisteis a la javierada... Lo de las "novicias normales" viene por el testimonio que ofrecieron a los jóvenes ese día... Choca ver, en estos tiempos, a jóvenes como ellas, NORMALES y corrientes, tomando decisiones de seguir a Jesús en la Vida Religiosa.
Así que ánimo... La vida Religiosa, es para gente normal... Y cualquier opción cristiana también... María Chiquero nos ofreció un precioso testimonio desde su vida y trabajo con discapacitados. ¡GRACIAS A TODAS!

Anónimo dijo...

Tuve la suerte de conocer en Buitrago, como Directora y profesora. Eres una buena religiosa y una excelente persona. Tu porte exterior imponía, pero detrás de todo eso, descubríamos una bella persona, humana y cercana... Sabíamos que nos querías...
Gracias por aquellos años tan maravillosos de Buitrago. ¡No cambies! Necesitamos más religiosas como tú... Hacía mucho que no sabía de ti y me ha alegrado, por casualidad, encontrarte en este blog...